Copa América
El enigma Scaloni: del acierto de Guido Rodríguez, a los nulos minutos de Agüero
Otra vez el entrenador sorprendió con la formación del equipo en el triunfo 1-0 frente a Uruguay y la Selección volvió a ser “Messi-dependiente”. El reemplazante de Paredes fue el héroe y Cuti Romero nuevamente aprobó.
Una sana costumbre: como en cada previa, el entrenador de la Selección Argentina, Lionel Scaloni, volvió a dar la nota con los cambios en la alineación inicial en la antesala al duelo frente a Uruguay, correspondiente a la fecha 2 del Grupo B de la Copa América. Si bien el equipo nacional demostró ser mejor, no mucho, que los uruguayos dirigidos por Óscar Washington Tabárez, El Clásico le puso la lupa desde el estadio Mané Garrincha de Brasilia a las modificaciones del técnico Albiceleste y a los futbolistas que estuvieron en cancha.
De arranque, en el encuentro de ayer hubo cuatro cambios con respecto a lo que fue el empate 1-1 en el debut ante Chile. Molina Lucero jugó en lugar de Gonzalo Montiel, en un cambio que tiene que ver con algo de bajo rendimiento más parte de cansancio por parte del lateral de River. Volvió Cristian Romero, la gran aparición de la defensa, que se recuperó de una distensión y volvió a demostrar que la blanca y celeste le queda pintada. Martínez Quarta, de flojo partido en el estreno, le dejó su lugar. Además, Marcos Acuña, que ingresó por Tagliafico, que tampoco viene mostrando su mejor forma en cancha, cumplió con creces: dio la profundidad en ataque que le pidió el DT y no sufrió en defensa.
Ya en el medio, Scaloni dio en la tecla, aunque con un poco de azar. Por primera vez no estuvo Leandro Paredes, quien por un golpe en la zona intercostal fue baja, y su lugar fue ocupado por Guido Rodríguez, el héroe de la noche.
¿Y Messi? El mejor del mundo siempre es figura. El Diez y capitán de la Selección se puso el equipo al hombro cada vez que éste lo necesitó. Generó la mayoría de las situaciones en ofensiva y durmió el juego en los últimos minutos del encuentro. Los que ingresaron no desentonaron en un partido que fue discreto. El semblante fue bueno. ¿Cosas por mejorar? Muchas.