Gimnasia cierra el mes con un poco de alivio económico

La dirigencia confirmó el pago de los sueldos de junio y una parte del aguinaldo. Se espera reflotar las conversaciones con el Gobierno para volver a cobrar la ATP.

Tras no obtener señales po­sitivas para cobrar cerca de 9 millones de pesos que ha­bían ingresado en mayo y junio por parte del Gobierno nacional, Gimnasia finalmente pudo ac­ceder a los fondos que estaba buscando. De este modo terminó de pagar los salarios de los empleados, y hasta incluso pudo depositar el 50 por ciento de los aguinaldos, según confirmó una calificada fuente de la dirigencia a diario Hoy.

Esta situación trajo cierto alivio económico, ya que la premisa de la dirigencia era no arrancar el mes de agosto con retrasos que se hubiesen traducido en más deuda para refinanciar en el futuro.

Si bien no se confirmó que el dinero del pago haya llegado por parte de un aportante privado, la realidad indicar que el Lobo pudo terminar de pagar los sueldos. Quedará para el futuro el resto del medio aguinaldo acordado con los empleados de la institución, que en los próximos días incrementarán sus tareas (ver aparte).

Una de las principales preocupaciones que persisten en el Lobo es que la AFIP no siga implementando requerimientos para poder disponer del beneficio de la Asistencia a la Producción y el Trabajo (ATP). Esto le permitió disponer de casi nueve millones de pesos en mayo y junio, que compensaron la caída que tuvo la institución por los ingresos que bajaron por comercialización de la marca, venta de entradas y sobre todo, cobro de cuota social. En tal sentido, se estima que desde que arrancó el aislamiento, allá por el 20 de marzo, Gimnasia perdió más del 40 por ciento de recaudación por cobro de cuota, y que en la actualidad estarían pagando un poco más del 55 por ciento de los socios que están en condiciones de hacerlo. A ellos se les suman los vitalicios que de manera genuina se ofrecieron a comenzar a pagar, más allá de que están exentos de hacerlo.

Con el plantel profesional hay un acuerdo implícito y se seguirá pagando los sueldos, más allá de que no hay certezas de que antes de fin de año se pueda jugar algún partido de manera oficial y que la fecha de los entrenamientos todavía no se definió.

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