Gimnasia vendió a Mammini pero hay sospechas por la recuperación de Hurtado
El delantero extranjero comenzó la semana entrenando con normalidad, pero este miércoles se reconoció que hace unos días tuvo un retroceso en la recuperación de una lesión que buscaron que no trascienda.
Debido a las condiciones climáticas que condicionaron los entrenamientos del martes y del miércoles, el plantel de Gimnasia hizo hincapié en la parte física para afrontar el partido del sábado a las 20 ante San Martín de San Juan.
De acuerdo a lo informado a El Clásico, a comienzos de la semana pasada el delantero venezolano Jan Hurtado sufrió un retroceso en el proceso de recuperación de una lesión muscular que le impide jugar de manera oficial desde el pasado 11 de Mayo, cuando el Lobo quedó eliminado de la Copa Argentina ante Central Córdoba de Rosario.
Desde hace más de tres meses que el jugador no puede pisar una cancha en un partido oficial y llegando al inicio de la sexta fecha del Torneo Clausura el cuerpo técnico ya contaba con él.
Hurtado fue titular en los amistosos de la pretemporada contra Defensa y Justicia y Aldosivi y se venía destacando con goles, en encuentros que no se extendieron por más de 60 minutos. Sin embargo, acusó una ruptura fibrilar el 28 de junio y acumula más de 50 días de recuperación.
La intención del uruguayo Orfila era que pueda jugar contra Lanús, al menos algunos minutos, pero entre el lunes y el martes pasado volvió a sentir dolor y tuvo que volver a entrenar de forma diferenciada.
Recién el martes de esta semana se sumó al resto de sus compañeros y la intención del cuerpo técnico es que pueda viajar a San Juan para por lo menos ir al banco de suplentes, ya que otro delantero como Briasco también está en duda por las exigencias físicas.
Vendieron a Mammini
Gimnasia decidió vender a Ivo Mammini por 300 mil dólares y el 20 por ciento de una futura venta al club AIK Solna de Suecia.
La comisión directiva consultó al cuerpo técnico y tras confirmar que no sería utilizado por parte de Orfila, se optó por aceptar la rescisión de su contrato y recibir esa suma en dólares que le permitirá mantener el equilibrio entre el déficit que arrojan los deportes amateurs y las escuelas del club y el pequeño superávit que tiene el fútbol profesional.
