UEFA decidirá mañana si le quita la final de la Champions League a San Petersburgo
La Unión Europea de Fútbol Asociado (UEFA) realizará mañana una reunión extraordinaria de su Comité Ejecutivo en la que se analizará, entre otras cosas, la sede de la final de la Liga de Campeones programada en Rusia, después de los bombardeos iniciados hoy por ese país en Ucrania.
El organismo presidido por el esloveno Aleksander Ceferin realizó este jueves la convocatoria que también evaluará la situación de los equipos de ambos países en las competencias europeas en curso.
"Tras la evolución de la situación entre Rusia y Ucrania, el presidente de la UEFA ha convocado una reunión extraordinaria del Comité Ejecutivo para el viernes 25 de febrero (a las 6.00 hora de Argentina), con el fin de evaluar la situación y tomar todas las decisiones necesarias", informó la entidad con sede en Nyon, Suiza.
"Se realizarán más comunicaciones después de la reunión del Comité Ejecutivo de la UEFA", completó el comunicado.
Según adelantó hoy el diario británico The Times con fuentes desde la casa madre del fútbol europeo, la invasión de Rusia a Ucrania con bombardeos puso en aprietos a la UEFA cuyos miembros ya ven como "imposible" la disputa de la final en la ciudad de San Petersburgo.
La final de la Champions League 2021/22, partido más trascedente del fútbol europeo a nivel clubes, está fijada para el próximo 28 de mayo en el Gazprom Arena de esa ciudad.
La empresa estatal de energía Gazprom es socio "premium" de la UEFA desde 2012 y tiene una fuerte presencia como patrocinador de la Champions League.
En mayo del año pasado, se renovó un acuerdo entre las partes por tres años más con la promesa de la organización de una Eurocopa en Rusia y finales de la nueva Liga de Naciones de selecciones.
Incluso, este miércoles estuvieron en duda la emisión de los anuncios comerciales de Gazprom durante los partidos de la Liga de Campeones que disputaron Atlético de Madrid-Manchester United y Benfica-Ajax.
El otro nexo de la UEFA con Rusia es que el actual director ejecutivo de Gazprom, Alexander Dyukov, es el presidente de Zenit (club dueño del estadio) y forma parte del Comité Ejecutivo.
El club de San Petersburgo, donde jugaba el mediocampista del seleccionado argentino Leandro Paredes, será visitante esta tarde ante Betis de España, por la vuelta de los 16avos de final de la Liga de Europa.
El equipo, que cuenta con el colombiano -ex Boca Juniors-, tiene en el plantel al defensor Yaroslav Rakitskiy, quien fue titular en el partido de ida que ganaron los españoles por 3-2.
El exjugador ucraniano Anatoliy Tymoshchuk, con pasado exitoso en Bayern Múnich, también forma parte del cuerpo técnico de Zenit.
La Unión Europea (UE) fijó su postura a través del primer ministro británico Boris Johnson.
"Me parece inaceptable que los grandes torneos internacionales de fútbol, como la final de la Champions o cualquier otro, puedan celebrarse en Rusia después de la invasión de un país soberano", aseguró.
La Premier League inglesa tiene al ruso Roman Abramovich como propietario de Chelsea, flamante campeón del Mundial de Clubes, de la Liga de Campeones y animador de la presente temporada.
Según el diario The Sun, el empresario, con supuestos vínculos con Vladimir Putin, no está en Londres hace meses y tampoco podría volver al país.
La UEFA, en conjunto con la FIFA, está "supervisando la situación", ya que la escalada de la crisis entre Rusia y Ucrania amenaza con afectar los partidos de fútbol europeos e internacionales que se celebrarán en ambos países, adelantó la cadena internacional CNN.
La FIFA también debe responder rápidamente ya que la federación polaca solicitó en las últimas horas que "aclare urgentemente" todas las cuestiones relacionadas al partido que deberá jugar su seleccionado ante Rusia el próximo 24 de marzo en Moscú, por uno de los playoffs de clasificación al próximo Mundial de Qatar.
Rusia inició esta madrugada una invasión a Ucrania con bombardeos en distintos puntos del país e incursiones terrestres en varios puntos del territorio que ya causaron las primeras muertes, varias de ellas civiles.