Abel Pintos, nuestro orgullo nacional

Con una cobertura exclusiva de Red 92 y Diario Hoy, recorremos la vida del artista y los detalles del show estelar que brindó para toda la familia.

Con esfuerzo y perseverancia, Abel Pintos se puso manos a la obra para planificar, junto a su equipo de trabajo, una serie de recitales para cerrar este año.

Ayer hizo su acto de presencia ayer para entonar las estrofas del himno argentino en la Bombonera, en el partido que la selección perdió 2 a 0 contra el combinado de Uruguay. Ahora, el grupo que siempre acompaña a la familia de Abel y que lo apoya en todos sus proyectos musicales y artísticos, entre otros, eligió el estadio de Vélez Sársfield para que se realice el hecho cultural que va a tener dos ediciones.

Así, las expectativas están muy altas, crecen minuto a minuto, y todas las energías están puestas para que el brillo sea mutuo en ambos lados del escenario. Es decir, el artista como tal y las generaciones que tanto lo aman y lo siguen desde hace casi treinta años.

Asimismo, como acostumbra, el muchacho siempre fue dando pistas sobre las veladas y así, a principios de noviembre, mostraba su entusiasmo sobre los ensayos y las vísperas en cuestión, por lo que explicó a través de Twitter: “Situación emocional: llorando de alegría en el ensayo de lo hermoso que está sonando la banda”. Para interactuar con sus aficionados, utilizó el hashtag #NosVemosEnLaMusica.

Para suerte del público, la lluvia duró tan solo un breve lapso. El show de Abel Pintos empezó en un horario puntual, tal y como supo anticipar en los días previos al momento tan especial. De esta manera, las luces de los escenarios ya estaban listas, la orquesta que lo acompañaba había afinado, hecho la prueba de sonido y cada uno de los músicos estaba ocupando su respectivo puesto. Además, si bien el clima era lluvioso, todo estaba dado para el disfrute.

Por otro lado, el público fue llegando para poder gozar de todos los detalles de este evento familiar. De esta manera, las personas arribaron, poco a poco, para tomar sus asientos o acomodarse dentro de lo que se llama “campo” y así tener una vista privilegiada.

Con los casi treinta años que Abel tiene en su carrera, ha cosechado seguidores de su misma edad, pero también otros más grandes, de otras generaciones, que se conmueven con las canciones de su autoría o con las reversiones que supo hacer de otros autores que aún perduran en el imaginario colectivo. Así, en una noche conmovedora, se podía ver el crisol de generaciones que concurrieron a ver a su ídolo contemporáneo que volvió a traer todas las glorias de la música popular argentina.

Con las voces entonadas, el público pudo seguir las canciones de Abel quien, a su vez, iba dando palabras de aliento, de calma, de alegría mientras presentaba sus temas o dialogaba con el público. Aún más conmovedor resultan sus discursos en las vísperas de un fin de semana en donde la ciudadanía elegirá a las autoridades que llevarán el país hacia adelante. Abel reflexionó sobre el presente, pero también sobre la actualidad de los valores en estos tiempos de vorágine y contemplaciones personales e interiores, ya sea porque se avecina el final del 2023 o también por los trabajos internos que uno suele hacer en momentos intensos como lo son los recitales de un ídolo.

Este evento se llamó Amores y rarezas y fue un show con dos aristas. Por un lado, bajo el término de “amores”, el galán de la canción recorrió sus mejores temas que lo consagraron a lo largo de su vida, sus preferidos y los clásicos de siempre. Por otro lado, también están incluidas las llamadas “rarezas” aquellos hits que quedaron por fuera de los repertorios, pero que la gente siempre suele pedir para traerlos a la actualidad. Asimismo, estas últimas tienen nuevas versiones con ritmos y melodías que las hacen más actuales.

Vale mencionar que Red 92 y el Diario Hoy sortearon dos entradas que fueron ganadas por Franco Ezequiel Escudero y Agustina Ippolitti, que fueron a divertirse junto al ídolo nacional.

Los looks del intérprete

Sobrio y esbelto, con un look en el que predominó el azul, con un poco de brillo. Abel Pintos se ha consagrado como cantante, pero también en lo que a la moda se refiere. Asimismo, siempre tiene un perfil distinguido, con detalles contemporáneos que hacen a la diferencia.

A lo largo de su recorrido personal, siempre mantuvo su cabello enrulado, corto y prolijo, con vestimentas que rondaban entre camisas, pantalones y borcegos o zapatos. Con colores sobrios, pero saliendo del común denominador de los jóvenes que crecieron en el cambio de mileno o en los años dos mil más precisamente.

Con el transcurso del tiempo, Abel se animó a más y cortó su pelo al ras, peinado que mantiene hasta la actualidad. Puede verse que rasura su cabeza y lo mismo sucede con la barba, que muta según sus gustos. Por ejemplo, a veces, tiene una barba candado muy pequeña, ha probado con bigotes o juegos con su look. Ahora tiene su cabeza rapada.

Respecto a la vestimenta, la presencia de Abel ha cambiado con el transcurso del tiempo, pero siempre siguiendo líneas contemporáneas. Por ejemplo, siempre se lo ve con pantalones del mismo corte que pueden estilizar sus piernas, recordemos que tiene una gran altura. Así, elige los pantalones rectos o chupines, así como también algunos con escasa abertura en el final de las botamangas.

Con respecto al calzado, los zapatos o borcegos son los preferidos cuando está sobre los escenarios, mientras que la línea urbana en zapatillas también para el cotidiano.

Asimismo, el artista, que es un referente en moda más urbana y folk, tiene un gran gusto en camisas, remeras, chalecos o camisolas que siempre componen los looks que prepara en el momento de hacer campañas, promociones o eventos.

Respecto a los accesorios, también son una marca registrada, puesto a que suele elegir anteojos, sombreros, pañuelos y pashminas para que terminen de afinar sus perfiles en la moda.

Las cadenas, pulseras, los anillos y los tatuajes están presentes en el cotidiano de Abel.

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