Annaleigh Ashford: “La actuación es un camino con alzas y bajas”

Bienvenidos al Chippendale es la nueva y apasionante serie de Star+. Cuenta la historia de Somen “Steve” Banerjee (Kumail Nanjiani), un inmigrante de la India que se convierte inesperadamente en el fundador del mayor imperio de strippers masculinos del mundo y no permite que nada se interponga en su camino. En ella, Annaleigh Ashford, la recordada actriz de American crime story, Impeachment: American crime story y obras de Broadway como Kinky boots y Wicked, encarna a Irene. Hablamos en exclusiva con ella para saber más del proyecto.

—¿Cuándo supiste que querías dedicarte al mundo del entretenimiento?

—Cuando era una persona muy muy pequeñita supe quería contar historias: no había nada que amara más que poder ver a los ojos de las personas al sacarlos de sus pensamientos y sorprenderlos contándoles un relato. De más grande ya supe que siendo actriz podía ayudar a este deseo, es una alegría para mí, pero claro, no es solo por mí, sino por la experiencia comunitaria que implica, especialmente en teatro; y sí, lamento sonar “tonta”y decir que siempre supe que iba a dedicarme a esto, pero es la verdad.

—¿Cuáles fueron las dificultades para llegar a tu primer rol?

—Empecé trabajando en el teatro de Denver de muy pequeña, así que fui afortunada de introducirme en las “aguas del teatro” muy pronto. Luego hice algo de TV y supe que quería hacer esto; estudié muchísimo en cada curso y oportunidad que tenía para hacerlo, tuve algunas audiciones y creo que lo más difícil es esto de tener tiempo, mucho, entre trabajos, eso es el desafío más grande. Hice Wicked en Broadway y al mismo tiempo trabajaba de niñera esperando el próximo rol. Puedo decir que la actuación es un camino con alzas y bajas, y las bajas son casi tan importantes como las alzas y el “próximamente”.

—De Broadway y American crime story a ­Bienvenidos al Chippendale, ¿qué fue lo que te atrajo del proyecto?

—Es delicioso, no es complicado, true crime, bailes y humor. Además, un grupo increíble de actores con el que nos convertimos en una familia, porque el contenido puede ponerse oscuro y es importante la contención y acompañamiento con los colegas.

—¿Qué sabías de este mundo de Chippendale?

— Lo que la mayoría de los americanos saben, sus vestimentas y que fueron los primeros en desnudarse para mujeres. Mi mamá me contó todo lo truculento del club, más allá de los bailes.

—¿Qué fue lo más difícil de encarnar a Irene? ¿Qué fue lo que más te gustó del personaje?

—Creo que se entiende el arco de su relato y su historia con su marido, por el hecho de que muchos creen que los esposos son los dueños de las vidas de las mujeres, y en esa época era más común. Entonces el desafío fue mostrar ese arco, esa transformación, que ella es alguien distinta a cuando empezó, que creo que lo logramos: el hecho que tomara sus decisiones, sus movimientos y salir adelante en medio del patriarcado. La parte más fácil fue trabajar con Kumail Nanjiani, fue muy divertido y fácil, el casting entero fue hermoso. Es uno de esos trabajos que terminan, porque sabés que es limitado, pero querés que siga, o que hagan un spin off “Irene, 1992, contadora”.

—¿Sentís alguna diferencia en la representación en el show de los hombres y las mujeres?

—Creo que es acorde al período que se cuenta, al poder que tenían las mujeres en esa época, nulo. Por eso creo que Bienvenidos al Chippendale hizo un gran trabajo hablando de ese momento, recreándolo desde todos los ángulos con la vestimenta, los maquillajes y peluquería, que me encantaban, pero no lo que se vivía en ese momento.

—¿Expectativas por el estreno de la serie?

—Creo que cada uno vendrá con sus propios anhelos sobre el show y se sorprenderán por la dinámica y complicaciones que van a encontrarse, además de que podrán sacarse sus pantalones mientras lo miran.