Sandra Bullock, exitosa en el trabajo y resiliente en el amor

Consagrada como intérprete, Sandra Bullock construyó una certera carrera en Hollywood y también supo afrontar el escándalo en que se vio envuelta por su exmarido, el conductor televisivo Jesse James, quien también ejerció como guardaespaldas.

Tras una serie de pequeños éxitos, James fue contratado para llevar a cabo un show sobre fanáticos de las motocicletas. Allí coincidió con Sandra Bullock y su ahijado, que habían llegado para conocer el detrás de escena. Entonces, el flechazo fue inmediato. Lograron charlar e intercambiaron sus teléfonos. Tiempo después se supo que habían comenzado a frecuentarse.

Mientras la relación se consolidaba en un período breve, Sandra disfrutaba del éxito de Vidas cruzadas y Miss Simpatía. A la vez, vivía su relación por fuera del ojo mediático. Así fue que logró organizar una boda breve el mismo día que cumplía 41 años. Además, ella se haría cargo de los hijos de su esposo: Chandler, Jesse, y Sandy.

Durante siete años, la vida de la pareja e inherente familia ensamblada brillaba, todos se llevaban muy bien y triunfaban en sus carreras. Por ese entonces, ella decía lo feliz que estaba, daba cuenta de la plenitud. “No es una casualidad que mi trabajo mejoró en el minuto que lo conocí: no puedo fallar porque tengo mi hogar. De acá a diez años espero que estén en mi casa las mismas personas que están ahora”.

Así pasaban los días y la carrera de Sandra estaba en la cima, a tal punto que ganó el Premio Óscar. Luego de la ceremonia, una revista norteamericana publicó una entrevista intima realizada a la modelo y tatuadora Michelle Bombshell McGee, quien aseguró que estuvo un año en una relación con Jesse James. Además, aseguró que el hombre salía con otras chicas mientras su esposa cumplía con sus trabajos cinematográficos. También se publicaron conversaciones de la intimidad bastante vergonzosas. Además, el escándalo inspiró dos película pornográficas.

“Merezco lo que me está pasando”

Al poco tiempo, eran las vísperas del estreno de la cinta, pero Sandra no asistió debido a problemas personales. Para paliar la tormenta, James salió a hablar y expresó: “Solo hay una persona para culpar de toda esta situación, y ese soy yo. La mayoría de las acusaciones en mi contra son mentiras y carecen de fundamento, pero merezco todo lo que me está pasando. Esto les ha causado a mi esposa y a mis hijos dolor y vergüenza, estoy profundamente triste por haberles ocasionado esto”.

El final del amor 

Con el correr de los días, aparecieron dos mujeres que también se sumaron a la lista de seducidas y abandonadas por el motoquero. Ellas fueron una fotógrafa y la bailarina Melissa Smith. Luego, él se internó en una clínica de rehabilitación por su adicción al sexo.

Por su parte, Sandra comenzaba los trámites de divorcio pero también continuaba con la adopción de Louis, un bebé de tres meses que nació en Nueva Orleans e iba a sumarse a la familia. Dadas las circunstancias, la mujer continuó con su maternidad a solas. Sobre la referencia de la llegada del bebé, afirmó en ese momento: “Dejé que el divorcio me afectara, pero Louis es el regalo más grande que pueda tener y voy a ser la mujer que quiero que él vea. Un hijo te obliga a seguir adelante”.

Asimismo, el muchacho salió de la clínica y aceptó su romance con la tatuadora Katherine Von Drachenberg Galeano asumiendo que tenían planes de matrimonio. De esta manera el escandaloso divorcio era un presagio explícito.