“La Policía vino muy rápido y salvó a mi bebé”

La última semana de la primera quincena de marzo terminó de la mejor manera para una familia de Altos de San Lorenzo, que muchas veces vieron ir o venir patrulleros por las calles del barrio para atrapar a los ladrones o evitar homicidios. Sin embargo, en este caso la intervención de dos oficiales de la fuerza pública tuvo que ver con el salvataje de una bebé de dos meses que se ahogó y dejó de respirar por unos segundos en la modesta casa de la calle 23 bis entre 82 y 83.

Tamara Ruiz Díaz estaba junto a su pareja Miguel Ángel, un changarín de la zona, intentando hacer dormir a Benecia Dadario, quien llegó al mundo en los primeros días del año. De forma inesperada, la bebé comenzó a toser y mostró signos de ahogarse cuando estaba alimentándose y la desesperación se adueñó de todos los presentes en la oscura madrugada del viernes.

Entre gritos de desesperación y mucha angustia, los vecinos llamaron a la policía y rápidamente llegó un patrullero con el subteniente Flores y la oficial Batallán: el lugar se llenó de curiosos y la policía cortó la cuadra con el móvil.

Luego de realizar algunas maniobras de RCP, la bebé volvió a respirar, pero se mostraba débil y con la necesidad de recibir más cuidados. Fue entonces que decidieron trasladarla de urgencia, con la mamá en el patrullero, hacia el Hospital de Niños, usando la sirena y cortando las calles en un verdadero acto heroico para intentar salvarle la vida.

“Me fui con lo que tenía puesto. Pero gracias a los policías la gorda está bien. Vinieron muy rápido y salvaron a mi bebé. Tenía moquitos y se ahogaba con la leche que tomaba. En el Hospital le hicieron un estudio del corazón y por suerte está todo controlado”, comentó Tamara, quien con 28 años vio peligrar la vida de su tercera hija.

Miguel Ángel Dadario vive junto a los familiares de su pareja en la calle 23 bis y realiza trabajos cuando lo contratan.

Ahora buscan salir adelante después del aporte de los dos oficiales de la policía, que no dudaron en realizarle las maniobras de resucitación y trasladar a la pequeña para que fuera atendida en el nosocomio. Un final feliz para los integrantes de esta familia después de un gran susto.