Musk y Bezos, una batalla por el espacio
Con denuncias, dardos cruzados y suspensión de un contrato con la NASA, los creadores de SpaceX y Blue Origin llevan su rivalidad hacia la estratósfera.
Con un costo de 2.900 millones de dólares, la NASA acaba de suspender un contrato con SpaceX. Así, la agencia federal de vigilancia se encuentra resolviendo dos quejas por la adjudicación del proyecto del módulo de aterrizaje lunar a la compañía de Elon Musk.
El demandante no es otro que Jeff Bezos, creador de Blue Origin y rival de fuste en la nueva carrera espacial. El gran anfiteatro de esa disputa no solo es el cielo, también las redes sociales, los pasillos de la ley y las conferencias de prensa.
“Es más que una batalla por el espacio”, dijo Dan Ives, analista para Wedbush. “Es una batalla de egos”. Jeff Bezos, de 57 años, es el hombre más rico del mundo con 202.000 millones de dólares; Elon Musk, de 48, ocupa la tercera posición con 167.000 millones de dólares. Ambos lanzaron sus sociedades a principios de los años 2000 y, mientras llevan adelante sus proyectos globales de banda ancha, luchan por conquistar el mundo de los vuelos tripulados al espacio como misiones o turismo privado.
El lunes por la noche, un tweet de Elon Musk claramente dirigido al proyecto de Bezos volvió a poner esta “guerra” en primera plana. SpaceX, la empresa de Musk, lleva una clara ventaja con el centenar de satélites puestos en órbita por su red Starlink. Bezos aún no ha lanzado ninguno, pero prevé invertir unos 10.000 millones de dólares en su constelación satelital Kuiper.
La confianza ganada con la NASA no es un detalle menor. El desarrollo de estos proyectos se realiza mediante contratos públicos propuestos principalmente por la agencia espacial y el Ejército estadounidense, que suelen subcontratar de manera creciente en el sector privado.