Preocupa el alto grado de informalidad laboral

Durante el primer trimestre del año se produjo una caída interanual de 152.000 empleos formales

Solo uno de cada 10 beneficiarios del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) tuvo un trabajo formal en el último año. El informe elaborado por la ANSES arroja que solo 826.195 titulares del bono de $10.000 sostuvo un empleo en relación de dependencia en el período que va de febrero de 2019 a enero de 2020.

De esta manera, la Administración Nacional de la Seguridad Social señaló que el 62% de los 9 millones de beneficiarios del IFE son trabajadores informales o están desocupados, un factor que ya era crítico antes de la llegada del coronavirus.

Durante el primer trimestre del año se produjo una caída interanual de 152.000 empleos formales, a la vez que se sumaron 93.000 asalariados informales y 237.000 cuentapropistas.

Actualmente, unas 7,5 millones de personas conviven con una situación laboral precaria, ya sea porque trabajan “en negro” o porque son autónomos. Además, 2 millones se encuentran desempleados.

Hoy en día, el IFE alcanza a uno de cada cinco argentinos (19,5% de la población). En este sentido, cabe destacar que durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio, aproximadamente 380.000 monotributistas y autónomos dejaron de pagar aportes de Seguridad Social por falta de ingresos.

Si bien desde el Gobierno apuntan a la aplicación de un plan pospandemia para generar 300.000 puestos de trabajo, el panorama no parece ser el mejor. Las consultoras estiman que el desempleo podría alcanzar el 13% a fin de año. Hace unas semanas, el economista y consultor, Orlando Ferreres, señaló que al terminar el 2020, uno de cada dos argentinos sería pobre, al proyectar un 50% de pobreza en el país.

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