China se abstiene de condenar la invasión rusa pero pide una "solución pacífica"

China continúa dando señales contradictorias al pronunciarse acerca del ataque ruso en Ucrania. Por un lado, el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, detalló la posición del gigante asiático, en favor de “respetar y salvaguardar la soberanía e integridad territorial de todos los países y del serio acatamiento de los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas”.

Además, el diplomático reivindicó “el concepto de seguridad común, integral, cooperativa y sostenible” y remarcó que, en el seguimiento de “la evolución del asunto ucraniano, la situación actual es algo que no queremos ver".

Wang expresó que Beijing “apoya y alienta todos los esfuerzos diplomáticos favorables a la solución pacífica de la crisis” e instó al Consejo de Seguridad de la ONU a que trabaje en “un papel constructivo en la solución del asunto ucraniano”. “La paz y estabilidad regionales, así como la seguridad de todos los países, deben ser las prioridades”, concluyó el titular de Exteriores chino.

Pero, tal como lo demostró Wang en su discurso, el gobierno chino insiste en no calificar el ataque ruso a Ucrania como una "invasión", se refieren al conflicto como “el asunto ucraniano” o “la situación actual”.

En tanto, Beijing se abstuvo ayer de votar una resolución de la ONU patrocinada por Estados Unidos que "rechaza" la agresión rusa. Beijing culpó al país norteamericano por la situación que atraviesa Ucrania, acusándolo de "echar leña al fuego".

Desde el gobierno, condenaron las sanciones de Occidente contra Moscú y dijeron que “no servirán” para lograr una salida diplomática a la crisis”. En ese sentido, medios locales informaron que a través de una conversación telefónica, Xi Jinping le pidió a Putin que negocie con Ucrania.

“Los cambios bruscos en las regiones orientales de Ucrania han estado llamando la atención de la comunidad internacional”, dijo Xi a su homólogo ruso, según un resumen oficial chino.

“La postura fundamental de China ha sido congruente con el respeto a la soberanía y la integridad territorial de todos los países, y respetuosa de la misión y los principios de la Carta de las Naciones Unidas”, dijo Xi.

Por su parte, Zhao Lijian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, escribió en redes sociales: “Estados Unidos debería preguntarse quién provocó todo esto", acompañando su comentario con una caricatura.

En la imagen se ve al tío Sam, que simboliza al país norteamericano, preguntando: “¿Por qué China no hace más esfuerzos para sofocar el incendio?”, mientras el propio tío Sam "apaga" con combustible el incendio que lleva la inscripción Ucrania.

En ese contexto, la embajada de China en Moscú expresó también en redes sociales que más del 80% de los conflictos armados registrados desde mediados del siglo pasado a inicios del presente fueron comenzados por el país norteamericano.

"De los 248 conflictos armados que se produjeron entre los años 1945 y 2001 en 153 regiones del mundo, 201 fueron iniciados por EE.UU., lo que supone el 81 por ciento del número total", enumeró la legación diplomática.

Las posiciones contradictorias de China pueden deberse a que Rusia es su socio estratégico en clave anti-occidental y de cierta forma debe permanecer de su lado, pero al mismo tiempo, el gigante asiático debe ser coherente con su posición histórica de "no interferir" en los asuntos de un Estado soberano.