Lula da Silva suma fuertes apoyos de cara al balotaje

El expresidente brasilero Fernando Henrique Cardo­so (1994-2002) anunció que apoyará a su histórico rival, Luiz Inácio Lula da Silva, en el balotaje presidencial del próximo 30 de ­octubre contra el actual mandatario Jair Bolsonaro.

“En esta segunda vuelta voto por una historia de lucha por la democracia e inclusión social. Voto a Luiz Inácio Lula da Silva”, publicó en sus redes sociales el presidente de honor del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).

Cardoso, de 91 años, acompañó la publicación en Twitter con dos fotografías con Lula. Una, de 1978, del momento en que el entonces líder metalúrgico respalda al sociólogo cuando volvía del exilio para presentarse a elecciones al Senado, que marcaron el inicio de la fase de apertura parcial de la dictadura militar (1964-1985). La segunda imagen es de 2017, cuando Cardoso acudió a saludar a Lula en el velorio de su segunda esposa, Marisa Leticia Rocco, a pocos meses de que el líder del Partido de los Trabajadores fuera condenado y preso por orden del entonces juez Sergio Moro.

Cardoso, un histórico dirigente del PSDB, que antes de la irrupción de Bolsonaro era el gran rival del Partido de los Trabajadores (PT) de Lula, ya había insinuado su apoyo al exmandatario poco antes de la primera vuelta, pero no lo había declarado abiertamente. A su vez, hace pocos meses declaró que se sentía arrepentido por haber anulado el voto en 2018 en el balotaje entre Bolsonaro y Fernando Haddad del PT, sobre todo porque el ultraderechista en los años 90 había propuesto durante un programa de televisión asesinar al entonces jefe de Estado.

Asimismo, la senadora Simone Tebet, que se ubicó tercera en la primera vuelta de las elecciones, manifestó ayer que apoyará al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva en el balotaje.

Tras haber obtenido el 4,16% de los votos en la primera vuelta, Tebet, del Movimiento de la Democracia Brasileña (MDB) del expresidente Michel Temer, afirmó en un discurso en San Pablo que el respaldo a Lula tiene que ver con el apoyo del líder del Partido de los Trabajadores en “defensa de la democracia”.

Lula y el presidente Jair Bolsonaro, líder de la ultraderecha, se medirán en una reñida segunda vuelta el próximo 30 de octubre, después de que ningún candidato obtuviera más del 50% de los votos válidos en la jornada electoral del domingo pasado.

El actual jefe de Estado, candidato a la reelección, recibió el martes el respaldo de los gobernadores de los tres mayores estados de Brasil, entre ellos San Pablo, principal colegio electoral del país, en tanto que Lula sumó al laborismo de Ciro Gomes, quien obtuvo el cuarto lugar en la primera vuelta.

Otro apoyo inesperado

José Serra, senador de centroderecha, anunció también que votará por Lula y se posicionó en contra del actual presidente.

El economista brasileño, miembro del PSDB, es un crítico opositor al expresidente, motivo por el cual sorprendió con su anuncio: “No quiero extenderme mucho, pero, frente a las opciones, mi voto irá para Lula”.