Kicillof priorizó la formación en penitenciarías
"Venimos de cuatro años en los que se pasó de 33.000 internos a casi 49.000, aumentando la capacidad de las cárceles solo en 1.000 plazas”
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, inauguró este viernes nuevas plazas penitenciarias y afirmó que su administración trabaja para “garantizar” que los detenidos cumplan la condena “en un lugar digno” y cuenten con “la formación en todos los niveles y en oficios”, para que puedan insertarse en la vida laboral una vez cumplida la pena y se evite así la reincidencia.
“Esto marca un cambio en la política carcelaria en general. Venimos de cuatro años en los que no solo se dejaron importantes deudas impagas, sino que también se pasó de 33.000 internos a casi 49.000, aumentando la capacidad de las cárceles solo en 1.000 plazas”, dijo el gobernador durante un acto en la residencia de Olivos junto al Presidente Alberto Fernández.
El mandatario bonaerense formuló esas declaraciones en la inauguración de 364 nuevas plazas y otras obras en tres cárceles del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), ubicadas en Florencio Varela, Magdalena y San Martín.
Recordó que, al asumir la gestión en la provincia de Buenos Aires, se encontró con una huelga de hambre de 12.000 internos “por falta de suministros”, lo que calificó como una situación “inhumana”, dada la falta de alimentos como consecuencia de la ausencia de pago a los proveedores.
“Eso se solucionó, y ahora estamos inaugurando 364 plazas y otras 2.000 en los próximos meses, algo que no ocurre hace muchísimo tiempo”, continuó.
En ese sentido, Kicillof se refirió a las medidas que se toman para evitar la reincidencia, y mencionó la importancia de “garantizar que cuando alguien cumple la condena tenga un lugar digno” y “dar prioridad a la formación en todos los niveles y en oficios”.
“Las estadísticas son impresionantes: quienes cursan estudios universitarios mientras cumplen condena tienen reincidencia cero”, remarcó el gobernador, y agregó que, de los 42.000 internos alojados en dependencias del SPB, “1.000 son analfabetos”, motivo por el que se busca “incentivar el estudio en cárceles”.