Senadora denunció a la seguridad del Congreso por acoso sexual

Un nuevo escándalo sacude al Senado luego que una legisladora acusó al personal de seguridad de golpes y manoseos, y a Villarruel de entrar en su despacho.

Una fuerte acusación, que derivó en una denuncia penal, sacudió el Senado en medio del recambio legislativo: una senadora se encontró sin poder ingresar a su despacho por orden de Victoria Villarruel, y una persona de seguridad la golpeó y la manoseó.

De acuerdo al relato de la senadora fueguina de Unión por la Patria, Cristina López, este lunes por la noche quiso ingresar a la oficina que viene ocupando desde hace dos semanas, que le dejó el salteño Sergio Leavy. Se encontró con que desde la presidencia de la Cámara alta le habían cambiado la cerradura, puesto una faja de clausura y sacado la placa con su nombre de la entrada.

Adentro del despacho habían quedado las pertenencias personales de López, por lo que contrató a un cerrajero para recuperarlas. En medio del proceso, apareció personal de seguridad que la agredió.

“La damnificada fue agredida físicamente, recibiendo un golpe en la pierna derecha, empujones y manoseos en la zona de los gluteos, en la zona pélvica delantera, en la zona de las entrepiernas, junto a un manoseo corporal en otras zonas, sintiéndose ultrajada”, se detalló en la denuncia presentada en la comisaría del Senado, que López deberá ratificar. En la presentación, el médico del Senado, Gustavo Apreda, constató un “hematoma a nivel de zona superior del tobillo derecho de 5 x 3 cm” en la pierna de la senadora fueguina.

A su vez, desde el personal de seguridad se reconoció que la orden previno de Victoria Villarruel. En uno de los videos que circuló del incidente se vio a un encargado de seguridad parado enfrente de la puerta para bloquear el ingreso de López y de la jefa de su bloque, Juliana Di Tullio, reconociendo que había sido la propia Villarruel quien había ingreso al despacho y lo había fajado. “¿Alguien está grabando lo que dijo? ¿La presidenta del cuerpo entró a un despacho de una senadora sin su permiso?”, se alarmó Di Tullio mientras mandaba mensajes en su teléfono buscando que alguien le diera explicaciones de la situación.

Según el descargo de López en redes sociales, el origen de la agresión había que buscarla en su juramento del viernes pasado cuando reasumió su banca “por los 30.000 desaparecidos”, cuestión que irritó a la vicepresidenta.

Noticias Relacionadas