Prisión preventiva para el acusado de atropellar y matar al niño de 5 años en Flores
Para la Justicia, está probada la responsabilidad de Ricardo Papadopulos, detenido bajo el delito de homicidio culposo con lesiones graves.
La Justicia dictó el procesamiento con prisión preventiva de Ricardo Papadopulos, el joven acusado de atropellar a una mujer y a su hijo de cinco años, quien murió por el impacto.
La medida fue adoptada por el Juzgado criminal y correccional 62, a cargo del magistrado Edmundo Rabbione, quien considera a Papadopulos autor del delito de homicidio culposo en concurso ideal con lesiones culposas de carácter grave, calificados por la conducción imprudente de un vehículo con motor (Arts. 45, 84 bis, segundo párrafo y 94 bis, segundo párrafo del Código Penal de la Nación) y dispuso su traslado a una unidad del Servicio Penitenciario Federal.
Las pericias, el análisis de los videos del lugar del hecho y los testigos oculares concluyeron que Papadoupulos inició el cruce de las avenidas con el semáforo rojo-amarillo, que tenía el campo visual despejado al acelerar (no obstaculizado por un camión) y que vio a las víctimas 24 metros antes de arrollarlas.
En vez de frenar, disminuir la velocidad o intentar eludirlos, Papadopulos -siempre según el fallo del juez Rabbione- aceleró en línea recta, con lo cual estaría probada en esta etapa su responsabilidad penal. Y sobre él pesa el agravante de haber escapado en lugar de asistir a las víctimas.
El hecho ocurrió el jueves 17 de diciembre, a las 23.02, en el barrio porteño de Flores. Débora Inés Agosti, de 45 años, y su hijo Isaac Sus, de 5, cruzaban la avenida San Pedrito en la esquina con la avenida Directorio. Allí fueron atropellados por el Volkswagen Gol que conducía Papadopulos. El pequeño murió en el acto y la madre fue internada en grave estado.
Papadopulos, 21 años, que circulaba sin registro y estuvo prófugo nueve días, hasta el martes a la noche estuvo detenido en la alcaldía de Palermo, acusado de homicidio culposo agravado.
En su descargo, el joven dijo que no vio a sus víctimas. Argumentó que un camión le obstaculizó la visión, que cruzó con el semáforo a su favor al llegar a la esquina donde se produjo el accidente. Además negó haber tomado alcohol.
El 26 de diciembre, Rubén Papadopulos, padre del acusado y quien en primera instancia se entregó en nombre de su hijo, pidió “perdón” a la familia de las víctimas y aseguró que se trató “de un accidente que le pudo pasar a cualquiera”.