Juegos Olímpicos

María Belén Pérez Maurice cayó en su debut y quedó eliminada

La esgrimista bonaerense perdió ante la húngara Anna Marton, una de las favoritas, por 15-12.

La esgrimista María Belén Pérez Maurice cayó en su debut en los Juegos Olímpicos ante la húngara Anna Marton, la favorita en la disciplina, por 15-12.

La argentina, que participaba por tercera vez del mayor evento deportivo del mundo, tuvo una excelente actuación que no fue suficiente para pasar a la siguiente ronda. Con su derrota, concluye la participación argentina en esgrima.  

Pérez Maurice terminó ganando el primer asalto por 8-5, pero cuando estaba 5-4 arriba la húngara sufrió un golpe en la rodilla izquierda que obligó a su atención por espacio de dos minutos.

En el arranque del segundo asalto, Pérez Maurice reclamó un punto pidiendo video pero no le fue concedido y Marton igualó en 8, instancia que se repitió a la inversa cuando estaban igualadas en 12, por lo que pasó al frente la húngara 13-12 y luego estiró a 14-12. Allí fue cuando Marton volvió a acusar un dolor en esa rodilla izquierda, pero ya no podía reclamar más atención.

Sin embargo se recuperó la medalla de bronce en el Mundial de sable de Moscú 2015 para la estocada final y terminó imponiéndose por 15-12 para eliminar a la argentina.

"La verdad que es cualquiera".se le escuchó decir de fondo a Pérez Maurice dirigiéndose a su entrenador, Lucas Saucedo, al término de la brega, luego de esos dos fallos discutidos que en ambos casos terminaron favoreciendo a la húngara, poseedora también de dos medallas plateadas y otra de bronce en el Campeonato Europeo.

Medalla de oro en amor

Luego de su participación, María Belén Pérez Maurice se encontraba realizando una entrevista en vivo con TyC Sports cuando fue recibió una propuesta inesperada. Su pareja y entrenador, Lucas Saucedo, sorprendió a la esgrimista al proponerle casamiento con un cartel que decía: "Flaca, te querés casar conmigo? Por favor".

Pérez Maurice, asombrada, aceptó rápidamente y ambos se fundieron en un abrazo. Sin duda, uno de los mejores momentos extradeportivos de esta edición de los Juegos Olímpicos. 

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