Zielinski se equivocó en el planteo inicial, y el equipo mostró actitud en el segundo tiempo

Estudiantes se fue al descanso perdiendo 1 a 0 sin tener prácticamente una situación de gol a favor. Muy bien parado, con cuatro defensores, cuatro mediocampistas y dos delanteros, Atlético se puso arriba de forma fortuita cuando el partido recién arrancaba.

El lateral Godoy no pesó en ataque y Aguirregaray, menos. Los centrales Noguera y Rogel achicaban hasta tres cuartos de cancha, casi de forma suicida. Los tres medios perdidos, Sánchez Miño especialmente. Y Pellegrini, Del Prete y Ayoví, sin peso arriba.

Para el segundo tiempo ingresaron desde el inicio Díaz, Zapiola y Rodríguez. Zielinski, evidentemente, se equivocó en la formación inicial. Estudiantes, fue y fue a puro centro y poniendo pibes. Sí, a los pibes. Sin ideas, sin juego, sin nada; salvo centro, centro y más centros…

Atlético Tucumán pudo haberlo definido antes. Pero no pudo, o no supo como hacerlo, y además se topó con Andújar, que estuvo rápido de piernas y achicó en varias jugadas, en la que algunos jugadores de Atlético quedaban mal parados o adelantados, pero el arquero siempre se mostró firme.

A los 41 minutos erró de forma increíble Menéndez para los tucumanos y al final Estudiantes terminó empatando. Mucho premio para el local y castigo para los tucumanos por no saber cómo resolver el partido cuando tuvo la chance de hacerlo.

Estudiantes deberá mejorar mucho, porque sigue sumando partidos sin poder ganar, relegó posiciones en la tabla y si no vuelve a ganar rápidamente puede peligrar el objetivo de clasificar a una Copa internacional.