Kevin Spacey en plena caída judicial

Reconocido como actor internacional gracias a sus roles en el séptimo arte como por ejemplo en Belleza americana o su interpretación en la serie House of cards, Kevin Spacey hizo su carrera con esfuerzo y perseverancia. Como dice la célebre frase, “todo lo sólido se desvanece en el aire”, y en la actualidad el artista transita un juicio por cargos de abuso sexual y violación a más de un hombre.

Al iniciar la primera jornada judicial, una de las víctimas, que realizó un arduo proceso judicial para que su identidad quedara en la intimidad estricta, comenzó su discurso haciendo una comparación entre la estrella de Hollywood y uno de sus personajes que lo lanzaron a la fama, donde interpreta a un asesino en serie que mata a sus víctimas para cumplir con los siete pecados capitales. En la escena final le quita la vida a la señora esposa de Brad Pitt, que se pone en la piel de un policía. Este asesinato es por la envidia y al finalizar el oficial lo mata por ira. El filme transcurrió en 1995 y también contó con la presencia de Morgan Freeman.

Además del anonimato que deseaba tener, la víctima no quiso permanecer en la sala de audiencias, por lo que el testimonio fue grabado para luego ser transmitido en vivo delante de los abogados y el jurado.

En la transmisión afirmó que el actor lo manoseó más de una docena de veces, además golpeó sus nalgas y lo obligó a manosear sus genitales. Estos hechos de público conocimiento habrían ocurrido de forma reciente.

Vale mencionar que el actor es juzgado por 12 cargos de agresión, abuso sexual y violación por parte de cuatro personas que afirman fueron sus víctimas entre los años 2001 y 2013.

Por su parte, tanto la estrella como sus abogados, han tirado por la borda estos dichos y afirman que todo es una gran mentira.

Para retomar el discurso del demandante primero, afirmó que lo conoció cuando el actor ejercía como director de un teatro en Londres. Allí notó que era una persona con mucha confianza y enseguida fue su víctima en contactos de dudoso buen gusto.

La ultima vez que compartieron un momento fue cuando asistieron a un evento en conjunto, el actor estaba ebrio y perseguido por la asistencia de paparazzis. Allí le habría pegado al denunciante y fue la última vez que compartieron un momento.

Por su parte, la Policía indagó por qué tardó tanto en hacer la denuncia correspondiente, y la víctima respondió que tenía ansiedad, estrés y un cuadro de depresión.

Un presente no muy grato

Desde un primer momento, Spacey se puso a disposición de la Justicia y, junto a sus abogados, estuvieron en colaboración con todas veces que fuera necesario que asistiera a declarar. De esta manera, siempre estuvo en libertad y hasta terminó sus proyectos laborales con tranquilidad. Por otro lado, fue declarado persona non grata dentro de Hollywood y también lo apartaron de trabajos que tenía dispuestos en películas. Es más, en alguna de ellas fue reemplazado por otros actores.

El apartamiento de otros proyectos le valió que fuera indemnizado con más de 30 millones de dólares y absuelto de las demandas que allí se presentaron. Por otro lado, sigue abierta la causa en Inglaterra, donde el juicio recién em­pieza y los testimonios presentan mu­cha tela para cortar.