teatro
Mi hijo solo camina un poco más lento, reflexiva y hermosa
La obra envuelve al espectador desde situaciones reconocibles y el constante asedio de mandatos en una sociedad que expulsa al diferente.
Guillermo Cacace dirige Mi hijo solo camina un poco más lento, que se presenta los domingos a las 11.30 en el teatro Picadero de la Ciudad de Buenos Aires, con entradas en venta en la boletería del teatro y Plateanet. En ella conoceremos a Branko (Juan Tupac Soler), que en el día de su cumpleaños debe lidiar con sus inseguridades, miedos y con la constante presión del afuera. Su deterioro progresivo, por una enfermedad, lo llevó a tener que desplazarse en silla de ruedas. Pero Branko sigue adelante, a pesar de todo, y en ello contará con el incondicional amor de su abuela, perdida en su memoria, su madre, quien se desvive para que él esté lo mejor posible, y una admiradora a la que no le importa su presente corporal.
Mi hijo solo camina un poco más lento envuelve al espectador desde situaciones reconocibles y el constante asedio de mandatos en una sociedad que expulsa al diferente. Un dream team actoral para una obra potente.