Un amor inesperado

Graciela Alfano y Nicolás Occhiato habrían compartido momentos de placer en encuentros clandestinos que rápidamente llegaron a su fin.

Durante una emisión del show televisivo Todo puede pasar, la diva Graciela Alfano y el conductor Nicolás Occhiato estuvieron como invitados para llenar de gracia la mentada producción.

Sin embargo, entre los cortes y el detrás de escena, ni lerda ni perezosa, Grace tomó la posta de la seducción innata que la caracteriza para enfocarse en atraer la atención del joven galán, que por esos momentos estaba soltero.

Entre miradas y sonrisas, la atracción fue inminente y al terminar el programa, seguramente intercambiaron sus números de teléfono para luego encontrarse furtivamente. Algunos indican que fue en los camarines mientras que otros aseguran que la ­tertulia continuó en otros paisajes dentro de la ciudad.

Esta noticia fue anunciada en el programa radiofónico de Jazmín Peña y Nati Jota junto al mentado galán. Tras el chascarrillo al aire, Rodrigo Lussich aprovechó su protagonismo en Intrusos en el espectáculo para exponer los detalles de esta historia inconclusa.

Al respecto, reveló: “A ella siempre le gustó él, a pesar de la diferencia de edad. Ella le dijo una vez a una panelista de Intrusos que gustaba de él y la frase fue: A este me lo voy a... Lo habrían hecho en el camarín. Siempre se dijo eso”. Lejos de quedarse callado, Daniel Ambrosino agregó: “No lo quiere contar porque en ese momento que ellos estuvieron, él había vuelto con Flor Vigna”.

Hasta el momento ninguno de los involucrados se expresó al respecto. Es más, en los últimos días, la bailarina estuvo entre las noticias por el lanzamiento de su primera canción titulada Uy, donde debuta como performer junto a un videoclip. También generó repercusión cuando dio a conocer su romance con Luciano Castro, que está recién separado de Sabrina Rojas.

Es más, el actor aceptó una propuesta y trabajó en el clip de su flamante novia que conoció en el gimnasio. Dado este amorío, la prensa especializada decidió buscar la palabra de Nicolás, que trabaja como comunicador y fue allí que exclamó: “Quiero que ella sea feliz. No hay persona que se lo merezca más. Es una buena persona, compartí mucho tiempo y la considero parte de mi familia. Hoy en día no puedo llevar un contacto diario porque sería muy difícil, pero es una persona que siempre está”.

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