Financiamiento millonario para el desarrollo de un lanzador de satélites

Desde el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación nacional se adjudicó a un grupo de investigación en materiales compuestos de uso aeroespacial del Instituto de Investigaciones en Ciencia y Tecnología de Materiales de Mar del Plata un financiamiento por $15 millones para desarrollar recipientes de presión ultralivianos que se emplearán en el vehículo espacial Tronador.

El equipo está a cargo del doctor Exequiel Rodríguez, investigador independiente del Conicet Mar del Plata y de la universidad nacional de esa localidad, quien dialogó con diario Hoy sobre el proyecto para el que fueron seleccionados.

—¿De qué se trata el proyecto del lanzador para el que se les adjudicó esta suma de dinero?

—Nosotros trabajamos con la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae), que está desarrollando un lanzador para colocar los satélites que se fabrican en nuestro país en órbita, pero desde Argentina. Ese proyecto requiere de las capacidades de gran parte del sistema científico y nosotros somos especialistas en materiales. Para el lanzador, el área de materiales es muy importante, nosotros trabajamos dando soluciones y desarrollos propios, como hemos hecho con el recipientes de presión que son los que llevan en el cohete gases presurizantes o combustibles. El requerimiento es que fueran muy livianos, nosotros empezamos a trabajar y llegamos a un prototipo que era muy funcional. Con los vaivenes presupuestarios que afectaron en los años anteriores se interrumpió un poco el desarrollo; por suerte el Ministerio de Ciencia sacó una línea especial para todo lo que tenía que ver con los satélites y nos adjudicaron este proyecto que tiene como misión pasar del prototipo a la escala real, eso implica mucho trabajo y este financiamiento nos es muy útil.

—¿Cómo evalúa el futuro de esta industria satelital en el país?

—Hay toda una industria de la colocación de carga en el espacio, y ahí Argentina puede ser parte cuando esté el lanzador terminado para ofrecer servicio de colocar carga en el espacio; hay muchas empresas a las que les vendría bien para no tener que depender de la agenda de otros países. Creo que cuando el cohete logre terminarse no tengo dudas de que va a cambiar la incipiente industria satelital, vender servicios y esto va a potenciar esa industria con la capacidad para elegir los momentos de lanzamiento que requiera nuestra propia agenda.

—¿Cómo analiza el momento actual de la ciencia argentina?

—La ciencia se está recuperando de lo que fue un desfinanciamiento muy fuerte que ocurrió en la gestión anterior donde todos la pasamos bastante mal en el ámbito científico, tenía subsidios asignados que no me mandaban, fue muy duro. Hay muchas necesidades que se van a tratar de satisfacer, viene el desafío de la descarbonización y lo tenemos muy presente, porque sabemos que se va a requerir el esfuerzo de todos. Creo que el sistema científico parece tener un resurgir y es un buen momento para trabajar en temas tecnológicos.