La falta de agua de todos los veranos: marchas y sequía desde hace una semana en varias zonas de la ciudad
Hay casas en las que no sale una gota de agua desde la semana pasada y en Los Hornos los vecinos decidieron movilizarse hasta la puerta de ABSA.
En el contexto de la semana más calurosa de enero, miles de platenses, berissenses y ensenadenses siguen padeciendo la falta de agua que viene caracterizando a la región durante todos los veranos.
Ayer, sin ir más lejos, algunos vecinos de Los Hornos se hicieron presentes en la puerta de la empresa ABSA para reclamar personalmente una respuesta, ya que hace una semana hay casas en las que dejó de salir el agua.
En Los Hornos
Daniel Arrite y Mariela Oviedo fueron dos de las personas que se pusieron al frente del pedido e intentaron llevar una solución a un problema que también engloba a otros vecinos de la región.
En Villa Argüello
En Villa Argüello, ya en la ciudad de Berisso en el límite con La Plata, el agua dejó de salir el jueves de la semana pasada, y apenas se registra un pequeño volumen en las canillas a partir de las 3 de la madrugada.
En barrio Cementerio
También varios vecinos del barrio Cementerio, dentro de la localidad de Altos de San Lorenzo, solicitaron una intervención urgente de la empresa ABSA en las calles 133, 134 y 135 desde 76 hasta 80, en donde dejó de salir el agua durante el día.
La respuesta oficial
En diciembre se cumplieron dos años del anuncio de una mega obra subterránea que procura extender y ampliar el sistema de circulación de agua para toda La Plata, Berisso y Ensenada, a los fines de poder abastecer todas las casas y departamentos que se fueron construyendo en las últimas dos décadas.
En el contrato de concesión, la empresa ABSA tiene la obligación de garantizar el suministro del servicio, la potabilidad del agua que llega a las casas y por todo eso fijar una tarifa por el servicio. Sin embargo, muchas veces las respuestas que les llegan a los vecinos tienen que ver con la falta de una infraestructura acorde para contener semejante demanda, ya que la población dentro de la zona del Casco Urbano y los perímetros de la capital provincial ha crecido, y en donde antes consumían agua 300.000 personas, ahora hay casi 500.000 procurando hacer lo mismo en el mismo momento. Esto se nota mucho más en las calurosas tardes de verano, cuando algunos llenan las piletas y otros buscan incrementar el consumo para refrescarse o bañarse en las duchas de las casas, con agua fría o caliente.