Rusia prepara su propia estación espacial

Si bien hace ya un año que Rusia anunció la decisión de retirarse de la Estación Espacial Internacional (EEI), sus planes se aceleraron en el marco de la guerra y las sanciones internacionales.

A través de su agencia espacial Roscosmos, construirá su propia estación espacial llamada ROSS, que operará en una órbita heliosíncrona de 400 kilómetros de altitud, lo que le permitirá monitorear toda la superficie de la Tierra, especialmente la región ártica. Esta órbita habilitará que cumpla dos funciones importantes: observaciones de alta frecuencia desde el espacio y un acceso más fácil a la estación en comparación con la actual EEI, lo que permitirá llevar a cabo más experimentos médicos y fisiológicos de lo que es actualmente factible en el segmento orbital ruso.