Rechazan pedido de Macri en causa por espionaje ilegal
Se trata del expediente por la vigilancia ilegal a familiares de las víctimas del ARA San Juan. El expresidente buscaba una audiencia previa a la indagatoria. La Cámara Federal de Mar del Plata deberá resolver sobre la continuidad del juez Bava, recusado por Macri.
La Cámara Federal de Mar del Plata rechazó ayer un pedido que había presentado la defensa del expresidente Mauricio Macri en la causa por el espionaje ilegal a familiares de las víctimas del hundimiento del submarino ARA San Juan, de manera que no habrá una audiencia previa a la declaración indagatoria, como lo pretendía el exmandatario.
El presidente de la Cámara, Alejandro Tazza, no hizo lugar a la solicitud presentada por Pablo Lanusse, defensor de Macri en ese trámite judicial, que lleva adelante el magistrado Martín Bava, interinamente a cargo del Juzgado Federal de Dolores.
Lanusse había recusado a Bava, pero el tribunal de apelaciones aún no resolvió sobre la continuidad del juez en la causa. Mientras tanto, el abogado presentó otro pedido para producir una serie de medidas de prueba y concretar una audiencia previa a la declaración indagatoria que Macri deberá prestar ante el magistrado.
Para Tazza, “no concurren circunstancias sustantivas habilitantes para instituir un espacio de verificación, confrontación y réplica de las cuestiones de hecho y de derecho introducidas” y, por lo tanto, “no deviene necesario” realizar una audiencia antes de la indagatoria.
Macri deberá presentarse a declarar el jueves, luego de haber recusado a Bava a través de un escrito la semana pasada, fecha fijada para su declaración. El juez se rehusó a desprenderse de la causa, entendiendo que las razones esgrimidas por la defensa del expresidente son “manifiestamente improcedentes”, Lanusse apeló y ahora la Cámara debe resolver el punto.
El pedido de recusación fue la segunda postergación del trámite de la indagatoria. Ya se había pospuesto antes, porque el 7 de este mes, en la fecha original de la citación, Macri se encontraba fuera del país.
El exmandatario está imputado en la causa desde septiembre del año pasado, cuando el fiscal Daniel Adler tomó una denuncia de la interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño Iglesias Paíz, en la que se apuntaba a Macri por ser el “responsable de fijar los lineamientos estratégicos y objetivos generales de la política de inteligencia nacional” y, por ende, de las maniobras de espionaje ilegal a los allegados a las 44 víctimas del hundimiento del submarino.
“Yo no espié a nadie, ni mandé a espiar a nadie. Ni en esta causa ni en ninguna otra”, se defendió el expresidente.